Cuando un amor se termina, cuando la ilusión se hace pedazos y el mundo se derrumba, buscamos salir de la oscuridad con lo poco que tenemos; tambaleantes, intentando encontrar un camino para levantarnos y empezar de nuevo. Cuatro inviernos te acompaña en ese camino de descubrir que, más allá del frío del desamor, los inviernos pueden ser cálidos. Cuando el universo parece colapsar frente a nosotros, hace falta todo el coraje del mundo para salir a descubrir nuevos horizontes. El dolor se transita con la poesía como arma para enfrentar la incertidumbre de una realidad que sorprende día a día. Cuando no hay esperanza, y cuando el miedo te paraliza, la poesía sale al encuentro; sale al rescate. Pero no te equivoques, este no es un libro para hundirse en la autocompasión. Este libro quiere ser un escudo, una campera bien abrigada, una manta para envolverse, abrigarse y salir a la intemperie. Una palabra para esos días en los que necesitás aliento. Un libro para descubrir el calor que esconden los inviernos.