Resumen

Cada día que transitamos no regresa. Por lo tanto, disponemos la posibilidad de vivir plenamente cada uno de ellos.</p> El tiempo reconoce lo que logra el pasado, aunque en la antigüedad no comprendíamos qué nos depararía el futuro.</p> Lo que ha sucedido en el ayer nos ayuda a evolucionar para dirigirnos con libertad hacia un nuevo sueño.</p> Tenemos la oportunidad de vivir el presente asimilando las idas y vueltas, disfrutando los maravillosos momentos y haciéndonos cargo de los malos instantes. Hoy podemos crecer para el futuro sin pensar en él con desasosiego.</p> Así aceptaríamos instantáneamente nuestro destino; el que creamos nosotros, el que nos otorga señales para que determinemos si optamos por cambiar el sendero en el que vivimos o si persistimos por el mismo.</p> La vida se encuentra en avance; tenemos que cumplir nuestra misión en ella. Vivamos aquí y ahora.</p> Tomás Guala