Nació en Paraná (Entre Ríos), ciudad que ama y disfruta junto a su amada familia. Desde pequeña recorría las calles céntricas de la ciudad observando los diseños ornamentales que coronaban los comercios y los edificios públicos. Intuyendo vestigios de una antigua ciudad pujante y bella, inventaba mil historias sobre sus habitantes. Barrancas de amor, su primer libro, es el logro de un sueño largamente gestado, donde ha volcado su ferviente imaginación y su pasión por la lectura. Además, su formación como sacerdotisa de la diosa y como terapeuta holística (biodecodificación, terapia de vidas pasadas, entre otras) le brindó herramientas y saberes para introducir en sus narrativas.